La Audiencia Nacional ha anulado el Expediente de Regulación de Empleo en la empresa pública Tragsa que afectó al 13% de su plantilla y ha obligado a readmitir a los despedidos, según una sentencia conocida este martes. El ajuste laboral, que iba acompañado por otro ERE en su filial Tragsatec y que también ha sido tumbado por el tribunal, incluyó a un total de 1.336 empleados tras rebajarse en unas 300 personas, aunque no todos los despidos habían sido efectivos. La empresa justificó la reducción de plantilla en causas económicas, organizativas y productivas, pero para los sindicatos no estaban justificadas.
El tribunal reprocha a la empresa que la forma en que se seleccionó despedidos a los trabajadores "no respeta a los trabajadores por motivos de mérito y capacidad". La sala recuerda que "en caso de las Administraciones Públicas es exigible una posición mucho más estricita que permita la determinación de los afectados sin acudir a decisiones arbitrarias o discreccionales y sin relación con los principios de mérito y capacidad".
El 30 de septiembre de 2013, Tragsa inició la negociación del ERE de las dos empresas. En Tragsa hubo un preacuerdo con los sindicatos CC OO, UGT y CSIF en el que rebajaba los despidos de los 836 anunciados una horquilla entre 369 y 593 a cambio de bajadas de sueldo y otros recortes. Pero la asamblea de trabajadores rechazó ese pacto por un 62% frente al 34%, En Tragsatec no hubo acuerdo. Al final, los ERE incluyeron a 726 despidos en Tragsa, de los cuales 150 ya han sido despedidos, y 610 en Tragsatec (frente a los 803 previstos inicialmente en la filial). En este último caso no se habían materializado todavía las salidas de la empresa.