La ceremonia de inauguración de los fastos del Tricentenario en conmemoración de la derrota de Cataluña de 1714 comienzan este sábado en la Seu Vella de Lleida, reconvertida tras caer ante las tropas borbónicas en cuartel militar. Miquel Calzada, comisario del Tricentenario, ha elegido Lleida como escenario al ser la primera ciudad catalana caída ante las tropas borbónicas. El acto inaugural será presidido por Artur Mas, y comprenderá un espectáculo multidisciplinar ideado por el director artístico Josep Maria Mestres, en el que participarán, entre otros, el Coro de Cámara de Lleida, el Coro Vivaldi o la Orquesta de Cámara de música antigua Vespres d'Arnadí.
El acto de este sábado será el primero de una serie de hasta 80 eventos que recordarán los sucesos de 1714 y que tendrán como lema Viure Lliure (Vivir libre). Entre las actividades programadas habrá teatro, exposiciones o certámenes literarios, con nombres propios como La Fura dels Baus, Oriol Broggi o Jordi Casanovas. El Museo de Historia de Cataluña acogerá un congreso sobre el Tratado de Utrecht y el periodista Enric Calpena coordinará un encuentro de Novela Histórica que otorgará el Premio Internacional de Novela Histórica Barcino, creado para la ocasión. Los actos cuentan con un presupuesto de 2,5 millones de euros.
Pese al interminable rosario de eventos, que implicará a instituciones autonómicas, entidades sociales y a un amplio sector del mundo cultura, uno de los platos fuertes del Tricentenario, la entrega del Premio Embajador de Conciencia por la organización 'Art for Amnesty', de Amnistía Internacional (AI), se "cayó de cartel" a menos de un mes del comienzo del año. Fue un revés que llegó con crítica incluida al afirmar Amnistía Internacional que había considerado "no comprometerse con la celebración de un evento muy costoso y de indudable riesgo económico”.
Aunque este sábado comienzan los actos, el Tricentenario ha sido caldeado con anterioridad. A finales de verano tuvo lugar la esperada inauguración del Centro Cultural del Born, un equipamiento que rescata los restos del asedio de Barcelona por las tropas borbónicas y que ha costado 84 millones de euros además de 12 años de trabajo. El Centro Cultural del Born atrajo sobre sí la polémica por el contenido político de la interpretación histórica, pero si algún evento relacionado con el Tricentenario ha destacado por ser conflictivo ha sido el simposio 'España contra Cataluña', celebrado el diciembre, que reflejaba a España como un "proyecto común frustrado". PP, Ciutadans y UPyD llevaron a la fiscalía el simposio y el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo aseguró que el simposio era una "flagrante falsificación de la historia".